Cómo compartir tus fantasías sexuales

Cómo fantasear sin sonar como un pervertido

En una nueva relación sexual, puede ser angustioso compartir sus fantasías sexuales , gustos y disgustos con su nueva pareja. ¿Te va a juzgar? ¿Va a sonar como un pervertido si les dices lo que le enciende? Así es como debes hacerlo para compartir tus fantasías con tu pareja.

 

Pregunta: Mi novia me pregunta lo que me enciende. ¿Cómo puedo decir algo sin sonar como un pervertido?

 

Primer paso: Acepte sus fantasías sexuales

Todo el mundo tiene fantasías sexuales. Cada persona tiene una fantasía o fetiche – y algunas personas tienen más de una – y lo convierte en alguien que difiere mucho de persona a persona. Hay tantos fetiches sexuales , gustos en el mundo, como hay personas. Lo que te enciende es parte de lo que te hace sexualmente único, y no hay nada malo en ello ( a menos que tu fetiche sea ilegal) . Si aceptas tus fantasías y fetiches como parte de uno mismo y no sientes vergüenza por ellos, no vas a sonar como un pervertido cuando los compartas con tu pareja. Vas a sonar como un chico caliente, seguro, que sabe lo que le gusta y lo que quiere. Su actitud de ello depende en gran medida de su actitud al respecto.

Segundo paso: Cuando su pareja abra la puerta

Si tu pareja te ha pedido que compartas con ella tus fantasías sexuales , esta es una puerta abierta que debes aprovechar. Claro, ir al grano y decir a tu pareja: «Oye, ¿te gusta morder durante el sexo?» Puede sonar extraño viniendo de la nada, pero si tu pareja te pregunta qué te gustaría que te hiciese en el dormitorio no deber mostrarte avergonzado al decírselo. Ella te está haciendo saber que ella quiere compartir fantasías sexuales contigo. Esta es una señal de que ella es más abierta sobre el sexo de lo que piensas. Toma ventaja de la situación y habla de lo que te gusta y lo que le gusta. ¡Podrías encontrar que lo que te calienta a ella la excita demasiado y viceversa!

Tercer paso: Haz que sea divertido

Compartir tus fantasías sexuales con tu pareja no se supone que es angustioso, se supone que es divertido. Informarse acerca de las fantasías sexuales de tu pareja y compartir las tuyas con ella es parte de la diversión de una nueva relación sexual. Si todavía estás nervioso por compartir lo que te calienta con ella, trata de jugar a un juego sexual divertido para aflojar la tensión. Si decides compartir tus fantasías y fetiches con tu nueva pareja, no tengas vergüenza o miedo de hacerlo. Haz que sea divertido y emocionante en su lugar, porque en realidad no es tan gran cosa como piensa que es.